Las penas de Rosario
I
Los padres de Rosario pelean
‘Es por mi culpa’, ella piensa
Y oculta en el baño
Retoca un moretón a su madre
A la altura de las cejas
Rosario cumplió nueve
Y ya es una mujer entera
Le regalaron zapatitos blancos
Pero aunque lo disimule
Rosario tiene penas
Nueve navidades
Lleva de ilusiones Rosario
Jamás recibió hermanos
Jamás recibió un perro
Sólo dos padres y una abuela
Por eso lleva una cajita en la cartera
Donde guarda una a una esas penas
II
Cada viernes
Rosario compra gardenias
Con dinero que roba a su abuela
Visita a su padre, pues
Ya no se asusta cuando entra a la celda
A cambio recibe una carta
De perdón dirigida a su madre
Pronto acabará la condena
Y mal que les pese
Ambos queman culpas en la hoguera
III
La pequeña escucha pasos
El otoño lo ha traído de vuelta
Llueven lágrimas y asfixian abrazos
Pero el júbilo durará poco
Si el rencor es el que ordena
Rosario guarda una cajita con penas
Pero ya está llena
Por eso es que esconde
Un cuchillo en otra cartera
Desde hace meses no compra gardenias
Rosario persigue la suerte
Pero la suerte no la persigue a ella
Siempre quiere opinar
Hace tiempo perdió la inocencia
Mas su padre se enerva y se enerva
IV
En la casa yace silencio de muerte
Oculta bajo la cama, Rosario tiembla
Tras la ventana sobrevuela un cuervo
Su madre le grita: ‘Qué has hecho’
De a gotas, la sangre chorrea
Rosario ya no siente culpa
Rosario ya no siente penas.
Los padres de Rosario pelean
‘Es por mi culpa’, ella piensa
Y oculta en el baño
Retoca un moretón a su madre
A la altura de las cejas
Rosario cumplió nueve
Y ya es una mujer entera
Le regalaron zapatitos blancos
Pero aunque lo disimule
Rosario tiene penas
Nueve navidades
Lleva de ilusiones Rosario
Jamás recibió hermanos
Jamás recibió un perro
Sólo dos padres y una abuela
Por eso lleva una cajita en la cartera
Donde guarda una a una esas penas
II
Cada viernes
Rosario compra gardenias
Con dinero que roba a su abuela
Visita a su padre, pues
Ya no se asusta cuando entra a la celda
A cambio recibe una carta
De perdón dirigida a su madre
Pronto acabará la condena
Y mal que les pese
Ambos queman culpas en la hoguera
III
La pequeña escucha pasos
El otoño lo ha traído de vuelta
Llueven lágrimas y asfixian abrazos
Pero el júbilo durará poco
Si el rencor es el que ordena
Rosario guarda una cajita con penas
Pero ya está llena
Por eso es que esconde
Un cuchillo en otra cartera
Desde hace meses no compra gardenias
Rosario persigue la suerte
Pero la suerte no la persigue a ella
Siempre quiere opinar
Hace tiempo perdió la inocencia
Mas su padre se enerva y se enerva
IV
En la casa yace silencio de muerte
Oculta bajo la cama, Rosario tiembla
Tras la ventana sobrevuela un cuervo
Su madre le grita: ‘Qué has hecho’
De a gotas, la sangre chorrea
Rosario ya no siente culpa
Rosario ya no siente penas.